Helado de tarta de queso con fresas

19.07.2020

Seguimos con recetas fresquitas para hacer más llevadero el calor. Esta semana os propongo un helado casero, sin necesidad de heladera. Hemos preparado un sirope de fresas para acompañarlo, pero podéis combinarlo con otras frutas del bosque, como arándanos o frambuesas.

Si os gusta preparar helados, no dejéis de visita la tarta helada "Comtessa" casera, muy fácil de preparar y con un resultado que os sorprenderá.

Ingredientes:

  • 250 gr de queso crema
  • 250 ml de leche condensada
  • 300 ml de nata para montar (mínimo 35 % de materia grasa)
  • 6-8 galletas maría o digestive
  • Un cucharada de zumo de limón
  • Una cucharada de extracto de vainilla
  • 300 gr de fresas
  • 100 gr de azúcar
  • Dos cucharadas de agua.


Elaboración:

Empezamos preparando el sirope de fresas, podemos utilizar fruta fresca o congelada, si utilizamos frescas, entonces las troceamos y las colocamos en un cazo, junto con el agua y el azúcar. En el caso de que utilicemos fresas congeladas no hará falta que añadamos el agua.  Calentamos a fuego medio bajo, cuando tenga el primer hervor, bajamos el fuego muy bajo y dejamos cocinar unos 10 minutos, moviendo de vez en cuando.  Dejamos enfriar un poco y trituramos. Reservamos mientras preparamos el helado.

Montamos la nata y reservamos en el frigorífico.

En un cuenco añadimos el queso crema y la leche condensada (puede ser desnatada sin problema) y batimos unos minutos hasta que nos quede una mezcla cremosita. 

Incorporamos el zumo de limón y batimos.

Añadimos el extracto de vainilla y volvemos a batir.

Ahora vamos a incorporar la nata montada que teníamos reservada con movimientos envolventes.

Troceamos las galletas muy pequeñitas con la ayuda de un cuchillo.

Cogemos un molde (yo he utilizado uno metálico rectangular para hacer bizcochos) y añadimos la mitad de la mezcla, colocamos por encima la mitad de las galletas y una capa de sirope de fresas. Cubrimos con el resto de la mezcla y colocamos el resto de galletas y otra capa de sirope. Podéis reservar un poco de sirope para decorar a la hora de servir, os aseguro que le da un toque muy rico.

Con la ayuda de un tenedor hacemos movimientos en forma de onda para que nos quede una mezcla irregular.

Tapamos a piel con papel film, sin que quede aire entre el helado y el film.

Congelamos toda la noche.

Al día siguiente antes de preparar las bolas podemos sacar el helado un poquito antes para servirlo mejor, aunque que no sea demasiado tiempo si hace mucho calor porque se nos derretirá.  Formamos bolas y añadimos un poco de sirope de fresa por encima.

Espero que lo preparéis y os guste tanto como a nosotros.


Si te gustan estas recetitas puedes seguirme por Facebook y Instagram.

Hasta el próximo domingo!!! Besitos itos.