Cupcake Red Velvet

17.02.2019

Esta semana os traigo unos cupcakes de terciopelo rojo, mi marido me comentó que le apetecían unos capcakes pues hacía años que no los horneaba, además ayer mi compañera de trabajo María José me preguntó por la receta del frosting de queso, y como está semana los comercios han estado inundados de corazones rojos, pues una cosa llevó a la otra y para contentar a todos he llegado a la recetita de esta semana, espero que os guste.

Ingredientes (para 12 capcakes pequeños):

  • 150 grs de harina
  • 150 grs de azúcar blanco
  • 60 grs de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
  • 120 ml de leche
  • una cucharadita de cacao en polvo puro
  • 1 y 1/2 cucharaditas de extracto de vainilla
  • una cucharadita de vinagre blanco
  • una cucharadita de zumo de limón
  • 1/2 cucharadita de bicarbonato sódico
  • una cucharadita de colorante rojo en pasta
Para el frosting de queso:

  • 150 grs de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
  • 300 grs de queso crema
  • 300 grs de azúcar glass
Para el almíbar:

  • 50 ml de agua
  • 50 grs de azúcar blanco
  • una cucharadita de extracto blanco

Elaboración:

Lo primero que prepararemos es la buttermilk, para ello añadiremos el zumo de limón a la leche y dejaremos reposar 15 minutos.

Por otro lado mezclaremos la harina con el cacao y tamizamos.

En un cuenco introducimos la mantequilla ya blandita cortada a dados y el azúcar y batimos a máxima potencia con la batidora de varillas durante 5 minutos o hasta que esté todo bien integrado.

Añadimos el huevo y seguimos batiendo hasta que quede integrado en la mezcla.

Incorporamos la vainilla y seguimos batiendo.

Ahora añadimos por tandas intercaladas la harina y la buttermilk , no hay que sobrebatir la mezcla, solo lo necesario para que se integre.

En un recipiente a parte mezclamos el vinagre con el bicarbonato sódico y en cuanto empiece a hacer reacción lo introducimos en la masa y mezclamos bien.

Incorporamos el colorante rojo y mezclamos de nuevo hasta que el color quede homogéneo.

Rellenamos las cápsulas 2/3 partes de su capacidad.

Horneamos en el horno ya caliente a 160 grados durante unos 18 minutos o hasta que que introduzcamos un palillo en la masa y salga limpio.

Sacamos del horno y dejamos reposar en el molde cinco minutos.

Pasado este tiempo pincelamos los cupcakes con el almíbar que habremos preparado calentando los ingredientes en un cazo hasta que queden todos disueltos.

Pasamos los cupcakes a una rejilla y dejamos enfriar completamente.

Mientras tanto preparamos el frosting de queso, para ello introducimos la mantequilla blandita en dados en un cuenco y batimos durante 5 minutos o hasta que esta quede cremosa.

Añadimos poco a poco el azúcar glass tamizado y seguimos batiendo.

Una vez todo integrado incorporamos el queso crema y seguimos batiendo unos cinco minutos más para que quede bien cremoso.

Rellenamos una manga pastelera con el frosting y una boquilla de estrella abierta y dejamos reposar cinco minutos en la nevera.

Ya podemos decorar los capcakes como más nos gusten, yo le he añadido trocitos de bizcocho desmigados por arriba, pero se pueden poner cualquier topping.

Si tenéis la suerte de que no vuelen enseguida, guardarlos en la nevera pues el frosting de queso debe mantenerse en frío.

Fuente: Esta receta es de Pam de Quiero cupcakes

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